
«Todo lo que se mueve desprende un olor. Todo lo que se desplaza deja un indicio, un rastro, una pista de lo que es.
La serie «Colección de fondos» a la que pertenece esta pieza, parte de un movimiento sobre la estructura de una pintura: pasar delante lo que está detrás; un gesto a la inversa que pone en cuestión la concepción «clásica» en su elaboración.
Así, el orden de las capas se invierte. Lo que está al fondo se desplaza al primer plano, dejando atrás lo que supuestamente es importante en la pintura. Y en ese movimiento a la inversa los planos se separan, el aire se adentra por la pintura y deja un rastro que nos ayuda a comprender su estructura; o quizás nos pierda más en ella».
Guillermo Mora