Sant Jordi ya se acerca, aunque este año es bastante distinto de los demás. Sea como sea no dejamos pasar una celebración tan propia sin hacer un homenaje olfativo a esta fiesta tan especial. Dentro del ciclo de propuestas #micasahuele os ofrecemos un taller que os mostrará la relación entre sabor, olor, forma y color.
Os proponemos crear nuestras propias rosas con la piel de diferentes cítricos, dependiendo de las frutas que tengáis en casa. ¿Qué necesitaremos?
– Una naranja, un limón o un pomelo.
– Un cuchillo o cúter
– Un palo o soporte para hacer el tallo de la rosa.
– Alfileres de ropa
¿Cómo lo haremos?
1. Pelamos la naranja separando la parte blanca y la naranja de la piel. Nos quedamos con la parte naranja exterior de manera que quede muy finita y también con la parte blanca que también nos servirá para hacer flores.
2. Hacemos una espiral con la piel para que tome la forma de una rosa. Verás que la corteza queda naranja y la interior con toques rosas al secarse. Mientras lo haces fíjate en cómo huele… disfruta de este perfume natural que verás que perdura en tu rosa durante días.
3. Cuando la tenemos enrollada la atravesamos con alfileres para inmovilizarla.
4. Pincha el palo o soporte a la rosa para que haga de tallo. Si lo prefieres puedes dejar la rosa bien apretada con un palillo y después decorar un centro de mesa con ellas sin necesidad de tallo.
5. Para un secado completo deben pasar unos tres días, dependiendo de la temperatura, pero podemos agilizar el secado si tenemos un radiador que ayude a su deshidratación. Una vez secas se le quitan los alfileres. Y si quieres puedes hasta pintar las rosas de colores.
6. ¡Cuantas más rosas puedas hacer mejor! Así puedes llegar a tener un ramo precioso y original que se irá secando poco a poco y desprenderá un aroma cítrico fantástico en tu casa.